Comparto una historia que antes de confirmarla exhaustivamente, elijo creerla por cierta. La historia que fácilmente puede encontrarse por internet dice así:
Un antropólogo propuso un juego a los niños de una tribu africana. Puso una canasta llena de frutas cerca de un árbol y le dijo a los niños que aquel que llegara primero ganaría todas las frutas.
Cuando dio la señal para que corrieran, todos los niños se tomaron de las manos y corrieron juntos, después se sentaron juntos a disfrutar del premio.
Cuando él les preguntó por qué habían corrido así, si uno solo podía ganar todas las frutas, le respondieron: UBUNTU, ¿cómo uno de nosotros podría estar feliz si todos los demás están tristes?
UBUNTU, en la cultura Xhosa significa: «Yo soy porque nosotros somos.»
Si bien la historia tiene muchos puntos para reflexionar, tomando el concepto de identidad colectiva que se infiere de Ubuntu, quería compartir algunas líneas, que aunque este antropólogo azorado no ha de leer, me hubiese gustado contarle de haberlo topado en algún café.
La negociación, juego (con prescindencia del motivo) que propuso el antropólogo, se planteó en términos de competitividad, suma cero, Win/Lose, el ganador se lleva todo, si por ganador se entiende quien se queda con la torta, perdón, las manzanas.
Ahora bien, ese enfoque no explora los intereses de los participantes, quienes tamizando lo que nosotros denominaríamos el elemento relación, en términos de Ubuntu, la propuesta del antropólogo se volvía una situación lose-lose.
Contemplando el interés que nace en ubuntu no había un escenario posible, en el cual la consigna del antropólogo llevase a una situación win-lose. La resolución de la cultura Xhosa, necesariamente llevaba a un tratamiento win-win. Podría decir que, solo de ese modo se pudo llevar todo el valor que había disponible en esa mesa, la infelicidad colectiva restaba valor al resultado de la negociación, por lo que analizado bajo el prisma de los elementos la negociación colaborativa, un óptimo de Pareto solo en término de unidades de manzanas, no hubiese contemplado todo el valor que estaba en juego.
La vida es una negociación constante, y hay mucho más que manzanas en la canasta, Ubuntu.